Marta Albamonte, presidenta del Instituto, manifestó “preocupación” ante la eventual aprobación de esta ley que “vulnera el marco normativo de la CABA”.
El Instituto de Políticas Públicas para Buenos Aires participó de la Audiencia Pública por las ventas de tierras en Costa Salguero y Punta Carrasco. Marta Albamonte, presidenta del i-Ciudad, manifestó “preocupación” ante la eventual aprobación de esta ley y rechazó el proyecto ya que “vulnera el marco normativo de la Ciudad de Buenos Aires, la Constitución, la Ley 2930 del Plan Urbano Ambiental y la Ley Nacional de Ambiente”.
Con récord de participación ciudadana -hubo más de 7000 inscriptos-, durante 29 jornadas -fue también una de las Audiencias Públicas más largas de la historia de nuestro distrito- se expusieron distintos argumentos. El rechazo social al proyecto fue contundente: el 97% de los expositores se expresaron en contra de la venta de los terrenos.
De aprobarse esta ley, estaría cercenando la posibilidad de acceso a un paseo ribereño a toda la población, ya que las obras se construirían del lado del río. Es decir, generarán una barrera de cemento frente al río, algo muy distinto a lo que tanto admiramos de otras ciudades del mundo”, afirmó Albamonte.
Desde i-ciudad, “reconocemos a la construcción como motor fundamental del círculo virtuoso de la economía que genera más inversión, mayor empleo y mayor consumo. Pero siempre con el Estado actuando en resguardo del bien común. Se requiere una clara planificación que no se ve en este proyecto”, continuó.
Este proyecto de ley, que habilitaría la construcción de edificios de hasta 10 pisos, tampoco soluciona el déficit habitacional de la Ciudad de Buenos Aires. “No es el destino de estas viviendas, lo que deja al descubierto la falta de planificación con miras a los y las habitantes de esta ciudad”.
Mirá el video completo de la exposición:
Pandemia y espacios públicos
La pandemia ocasionada por el COVID-19 pone al espacio público en el centro del debate. Nos encontramos en un momento en el que repensamos la relación con la naturaleza, la escala en el diseño y hasta el futuro de las prácticas laborales. Se trata de un momento bisagra para las ciudades y las megaurbes como la CABA
En el AMBA habitan cerca de 15 millones de habitantes, es decir un tercio de la población total de la Argentina y todos requieren más espacios verdes para una mejor calidad de vida.
La cantidad de metros cuadrados por habitante es un índice que los organismos internacionales y las ciudades han adoptado como una variable a tener en cuenta a la hora de evaluar la calidad de vida en las grandes metrópolis.
Se considera mundialmente que contar con entre 10 y 15 m2 de espacio verde por habitante es una medida que garantiza el bienestar. La Ciudad Autónoma de Buenos Aires está por debajo de esa cifra, con 6,45 m2 de espacio verde por habitante, medida que se mantiene casi estable desde hace años (ver más en Indice de Bienestar Urbano)
Más allá de sus funciones ambientales, la ecologización urbana mejora la calidad de vida de las personas, con beneficios directos sobre su salud física y mental.
Lo vivido este año puso en evidencia que las aglomeraciones empeoran las condiciones de seguridad, higiene y salubridad -recordó Albamonte-. Cuando pudimos salir de la etapa de aislamiento, fueron los espacios públicos los lugares que los sanitaristas, los infectólogos y las propias autoridades de los distintos niveles gubernamentales nos han instado a utilizar para retomar algo de vida normal en medio de tanta anormalidad”.
“Por todo esto, es indispensable un manejo responsable de un recurso imprescindible, escaso y no renovable como es el espacio público”, finalizó.
Otros argumentos
Albamonte remarcó que, de aprobarse la edificación en la zona de Costa Salguero y Punta Carrasco “se estaría vulnerando el marco normativo de la Ciudad de Buenos Aires”.
El artículo 8 de las Constitución porteña establece que “la Ciudad es corribereña del Río de la Plata y el Riachuelo, los cuales constituyen en el área de su jurisdicción bienes de su dominio público” y son “de libre acceso y circulación”.
Al mismo tiempo, el artículo 27 consigna que la Ciudad “promueve la protección e incremento de los espacios públicos de acceso libre y gratuito, en particular la recuperación de las áreas costeras, y garantiza su uso común”.
Por su parte, el artículo 9 del Plan Urbano Ambiental “enfatiza la necesidad de maximizar la accesibilidad y la posibilidad de uso recreativo de las riberas y los cursos de agua que rodean a la Ciudad”.
Durante la audiencia, también se expresó preocupación por la cercanía que tendrían estos nuevos edificios de 10 pisos con el Aeroparque Jorge Newbery. En este sentido, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) publicó un informe donde advierte que las construcciones “vulneran los límites de altura establecidos por la superficie de ascenso en el despegue” y recordó las recomendaciones respecto a la contaminación sonora y las huellas de ruido.
Un poco de historia
- La Costanera Norte junto con la Sur fueron parte de un plan de estética edilicia que tiene casi 100 años.
- El Paseo Costanero del Norte surgió sobre tierras ganadas al río con escombros extraídos de la construcción de la actual línea B del subterráneo.
- El antiguo Concejo Deliberante sancionó una ordenanza que destinaba estos terrenos a la formación de un parque y un espacio público.
- Con los años, la zona se vio afectada de distintas formas: primero con la cesión de un sector para la ampliación del Aeroparque, la construcción del Circuito KDT, la ampliación de la Avenida Lugones, la Autopista Illia y el Viaducto Sarmiento.